La Asociación de Profesores de Instituto de Andalucía (APIA), el Sindicato de Médicos de Andalucía (SAM) y el Sindicato de Funcionarios de la Junta de Andalucía (SAFJA) inician hoy, viernes 18 de mayo, conversaciones para hacer un frente común y tomar medidas contra los recortes de la Junta de Andalucía. Recordamos este artículo del sindicato PIENSA-Volens
El sindicato APIA envió ayer un comunicado a sus afiliados que PEPA-Profesores reproduce aquí:Como ya sabrás el gobierno de la Junta finalmente se ha quitado la careta electoral y ha tenido que reconocer su situación de quiebra. Justificándose en la maldad congénita del gobierno central, al que tampoco tenemos la menor simpatía, la Junta ha decidido recortar como siempre: para salvar su administración paralela, el nido de su clientela, nos recorta de nuevo el sueldo a los funcionarios de verdad esperando que nos dejemos embaucar por un sentido piadoso de la solidaridad. Lo sentimos, no somos sacerdotes ni pensamos asumir en aras de la moral divina un error del que este sindicato advirtió seis millones de veces y del que sólo hay un responsable: la Junta. No es nuestro problema si regalaron ordenadores a los críos, ni es nuestro problema si inventaron nuevas instituciones que duplicaron las funciones de la real para poder actuar descontroladamente, a espaldas de la fiscalización de los funcionarios independientes. No es nuestro problema si crearon comisariados políticos para domarnos en nuestros centros o si liberaron del trabajo a millares de profesores adeptos al Partido, que ahora corretean ociosos por los pasillos de Torretriana o por los CEPs tratando de hacer un trabajo para el que no están preparados o que es sencillamente inútil.
Sí es nuestro problema si ahora no hacemos nada. Es nuestro problema si aceptamos que mientras nuestros sueldos son cuidadosamente desmontados los de las empresas públicas queden protegidos por una neblina de incretidumbre. Sí es nuestro problema si consideramos que un enchufado en una empresa pública absurda tiene más derecho de alimentar a su familia que nosotros.
Sí es nuestro problema si ahora no hacemos nada. Es nuestro problema si aceptamos que mientras nuestros sueldos son cuidadosamente desmontados los de las empresas públicas queden protegidos por una neblina de incretidumbre. Sí es nuestro problema si consideramos que un enchufado en una empresa pública absurda tiene más derecho de alimentar a su familia que nosotros.
Apia se reúne con sus socios de FASPI (SMA y SAFJA), así como con otros sindicatos para comenzar a perfilar un calendario de protestas. Confiamos en que haya unidad de acción y en que seamos capaces todos de tener claro qué nos jugamos. No se trata ya de ser buenos o malos: el recorte irá contra el que menos proteste o contra aquel cuya protesta sea menos visible.
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